Años antes en 1908 la situación política del país comenzó a agitarse, al darse a conocer una entrevista que realizo James Creelman, de la Persons Magazine, al entonces presidente de México el 18 de Febrero de ese año, en dicha entrevista Díaz aseguraba:
“He esperado con paciencia el día en que el pueblo mexicano estuviera preparado para seleccionar y cambiar su gobierno en cada elección sin el peligro de revoluciones armadas y sin estorbar el progreso del país. Creo que ese día ha llegado”
Se formaron diversos clubes antirreleccionistas en todo el país. En el estado de Coahuila además surgió el libro “La Sucesión Presidencial” en 1910, donde su autor, Francisco I. Madero, hace un análisis de la situación política mexicana y además critica el gobierno de Díaz.
Aparecieron varios partidos políticos, a raíz de la entrevista y el libro, algunos partidos a favor del actual gobierno y otros en contra, entre ellos se encontraba el Partido Democrático en el que habían participado Benito Juárez y Manuel Calero, y los Reyistas partidarios del General Bernardo Reyes, que fundaron el Club Soberanía Popular. A final Díaz se postulo nuevamente para presidente junto con Ramón Corral y como contrapropuesta surgió el Centro Antirreleccionista, con Francisco I. Madero como figura central.
En 1910, el 6 de Octubre Madero escapo de San Luís Potosí con destino a San Antonio, Texas, donde se reunió con sus familiares y partidarios. Allí redacto un documento conocido como el “Plan de San Luís”, el plan convocaba a la lucha armada, declaraba nula las elecciones para presidente, vicepresidencia, magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y diputados y senadores, y se reconocía como presidente provisional y “Jefe de Revolución” a Madero, y se insistía en reivindicaciones de carácter social para indígenas y obreros. El Plan de San Luís señalo el 20 de Noviembre como la fecha en que todos los mexicanos debían levantarse en armas contra el gobierno. Junto con este documento, Madero escribió un manifiesto dirigido al ejercito Federal, en el que exhortaba a unirse al movimiento revolucionario.
Creo que ya era mucho tiempo con un mismo gobierno y que tuvo razón Madero al levantarse en armas contra el gobierno de Porfirio Díaz, para que el pueblo se expresara, y que dijeran que querían un cambio de gobierno, aunque no fue la mejor manera de hacerlo.
“He esperado con paciencia el día en que el pueblo mexicano estuviera preparado para seleccionar y cambiar su gobierno en cada elección sin el peligro de revoluciones armadas y sin estorbar el progreso del país. Creo que ese día ha llegado”
Se formaron diversos clubes antirreleccionistas en todo el país. En el estado de Coahuila además surgió el libro “La Sucesión Presidencial” en 1910, donde su autor, Francisco I. Madero, hace un análisis de la situación política mexicana y además critica el gobierno de Díaz.
Aparecieron varios partidos políticos, a raíz de la entrevista y el libro, algunos partidos a favor del actual gobierno y otros en contra, entre ellos se encontraba el Partido Democrático en el que habían participado Benito Juárez y Manuel Calero, y los Reyistas partidarios del General Bernardo Reyes, que fundaron el Club Soberanía Popular. A final Díaz se postulo nuevamente para presidente junto con Ramón Corral y como contrapropuesta surgió el Centro Antirreleccionista, con Francisco I. Madero como figura central.
En 1910, el 6 de Octubre Madero escapo de San Luís Potosí con destino a San Antonio, Texas, donde se reunió con sus familiares y partidarios. Allí redacto un documento conocido como el “Plan de San Luís”, el plan convocaba a la lucha armada, declaraba nula las elecciones para presidente, vicepresidencia, magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y diputados y senadores, y se reconocía como presidente provisional y “Jefe de Revolución” a Madero, y se insistía en reivindicaciones de carácter social para indígenas y obreros. El Plan de San Luís señalo el 20 de Noviembre como la fecha en que todos los mexicanos debían levantarse en armas contra el gobierno. Junto con este documento, Madero escribió un manifiesto dirigido al ejercito Federal, en el que exhortaba a unirse al movimiento revolucionario.
Creo que ya era mucho tiempo con un mismo gobierno y que tuvo razón Madero al levantarse en armas contra el gobierno de Porfirio Díaz, para que el pueblo se expresara, y que dijeran que querían un cambio de gobierno, aunque no fue la mejor manera de hacerlo.
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